Bajo el terror de los líderes de las bandas de Petare se mantiene uno de los barrios más grandes y peligrosos de Venezuela, ubicado en Caracas; convertido en zona de guerra al disputarse el territorio constantemente.
Expertos criminologos tienen suspicacias pues resulta intrigante la reacción del presidente Nicolás Maduro; solo pretende exterminar una de estas bandas, porque es considerada opositora.
Un sistema social destruido que crea más delincuencia
Aunque en Petare siempre ha habido pobreza, la crisis económica comenzó a asfixiar a los petareños en 2014. En Petare la gente vive del rebusque; y aunque la mayoría tiene trabajos fijos, nadie come de los sueldos que proveen.
El desmejoramiento de la calidad de vida para quienes no podían protegerse de la economía venezolana, ensancharon la distancia entre las clases sociales.
Aunque la crisis política ya había tocado la puerta, su profundización fue un factor más de poder para los grupos delincuenciales sobre la población rodeada por tantos problemas.
Los politólogos consideran que el estado prescindió de su responsabilidad y la desplazó a los mismos ciudadanos; esto se hizo con el auspicio de la Alcaldía del Municipio Sucre, a través de la figura del juez de paz.
Este es el barrio con la tasa más alta de asesinatos de Caracas; se conoce como la ciudad más peligrosa del mundo, hoy día se ve dominada por poderosos líderes de las bandas de Petare.
La pobreza, la droga y los asesinatos, son los principales factores que empañan a toda una localidad de 500.000 vecinos en un sistema social deteriorado.
Durante años, este escenario ha afectado excesivamente a los más jóvenes, que acaban inmersos en la delincuencia, sin educación y con un alto índice de embarazos adolescentes.
¿Un barrio opositor?
Luis Izquiel, abogado penalista notificó que Wilexis es uno de los líderes de las bandas de Petare; domina el sector desde hace aproximadamente 6 años, con una banda que oscila entre 100 y 200 individuos con un elevado poder de fuego.
El experto asegura que Wilexis admitió que el barrio se manifestará a favor de Juan Guaidó; y como estrategia, el presidente Nicolás Maduro habría ido en su contra liberando a «El Gusano», su rival.
Por otra parte, existen versiones que aseguran que algunos políticos, estarían armando al Gusano y su banda para desplomar la banda rival.
Desde el 23 de enero de 2019, la situación se complicó
Todo inició cuando la proclamación de Juan Guaidó como presidente interino; esto hizo que miles de vecinos de la localidad salieran a apoyarlo.
Por su parte, El gobierno de Nicolás Maduro decidió contener las manifestaciones con las Fuerzas de Acciones Especiales (FAES). Los expertos presumen que esto rompió la alianza de gobernabilidad que existía con la delincuencia.
Entonces, comenzó una persecución hacia las bandas criminales mandadas por el juez de paz; el jefe de la mayor banda de antisociales de la zona, un hombre llamado Wilexis, pero al que todo el mundo apodó como «El Patrón» por su control sobre el territorio.
En los últimos días de abril de 2020 comenzó una nueva guerra entre bandas; nadie conciliaba el sueño, las ráfagas de tiros no lo permitían.
El 5 de mayo, Maduro pidió al ministro de Relaciones Interiores, Néstor Reverol, acabar con la delincuencia en Petare; así relacionó directamente a “Wilexis”, con las fallidas incursiones de grupos armados en la costa.
La operación policial y militar con helicópteros, allanamientos y detonaciones puso a la población de petare con los pelos de punta.
Guerra entre bandas en Petare
La guerra entre bandas viene presentándose desde años atrás; sin embargo este año cobró fuerza después de que Wilexis apoyara a Juan Guaidó. En este punto, las autoridades de seguridad del estado intervinieron con más agresividad.
El barrio se mantuvo en una especie de toque de queda, implementado entre los líderes de las bandas de Petare y las autoridades; estos dispararon a diestra y siniestra durante días, causando terror en los habitantes.
No obstante, luego de siete días, Maduro decretó una intervención bajo un operativo policial conformado por el FAES, el CICPC y la Guardia Nacional; pero solo para ir tras la banda de Wilexis Acevedo, conocido como el «Robín Hood» del barrio.
En las redes sociales, se han propagado miles de fotografías de los casquillos de las balas que han volado por los aires de Petare, desde hace semanas.
Wilexis comenzó su liderazgo en Petare en 2018, repartiendo bolsas de comida e imponiendo «cierto orden» en la localidad. Luego abandonó sus ofertas populistas y consiguió dominar con sus bandoleros armados el control de la zona.
Pero, después de que el expresidiario «El Gusano», reapareció en la escena no la ha tenido fácil; el sujeto llegó a Petare para reclamar su pedazo de territorio, declarándole la guerra a Wilexis.
Pero esto no es todo, tras conocerse la guerra entre las bandas, Nicolás Maduro decidió involucrar a Wilexis con Guaidó; y confirmó que lo ocurrido es parte de un «plan desestabilizador» vinculado a la Operación Gedeón que buscaba derrocar su gobierno.
Durante semanas se ha habado sobre las vinculaciones de los presuntos operativos de la Operación Gedeón en las costas de Venezuela. Entre los señalamientos directamente desde la Fiscalía General de la República figuran Juan Guaidó y en una ultima linea correlativa, figura el Wilexis de Petare.
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