¿Buscas una receta fácil y deliciosa para el almuerzo? ¡No busques más! Con esta receta de espinacas gratinadas, tendrás un plato delicioso en poco tiempo. La combinación de espinacas, salsa bechamel y queso es una apuesta segura para cualquier ocasión.
Las espinacas son conocidas por ser una fuente de nutrientes y vitaminas, lo que las convierte en un ingrediente popular en muchas cocinas del mundo. Esta verdura generalmente se utiliza para elaborar cremas o ensaladas, sin embargo, existen otras opciones como el gratinado al horno.
En cuanto el gratinado es una técnica culinaria que implica cocinar o dorar un plato en el horno hasta que se forme una capa dorada o crujiente en la parte superior. Esta técnica se ha utilizado en la preparación de platos como lasañas, pastas al horno, verduras gratinadas y más.
Ingredientes para el gratinado de espinacas
- 300 g de espinacas frescas
- 2 cucharadas soperas de harina
- 500 ml de leche
- 1 diente de ajo
- 2 cebollas tiernas
- Queso rallado al gusto
- Aceite de oliva virgen extra
- Sal
- Pimienta negra
Preparación:
El primer paso para elaborar nuestras espinacas gratinadas al horno es picar el ajo y la cebolla en cuadros muy pequeños. Reservamos la cebolla para más tarde.
En una sartén, calentamos aceite de oliva y cocinamos el ajo picado a fuego medio. Una vez esté ligeramente tostado, agregamos las espinacas y vamos a ir removiendo constantemente para que se cocinen.
Luego, añadimos sal y cocinamos durante unos 6 o 7 minutos. Una vez cocidas las espinacas, las retiramos del fuego y las reservamos en un bol o escurridor.
Una vez en este punto, preparar la salsa bechamel. Para ello, en la misma sartén donde hemos cocido las espinacas, agregamos las cebollas picadas con un poco más de aceite de oliva a fuego muy lento.
Cuando la cebolla esté transparente, añadimos las dos cucharadas de harina. Removemos y mantenemos la potencia del fuego a la mitad, con cuidado de que no se tueste la harina.
Poco a poco y sin dejar de remover en ningún momento, vamos añadiendo la leche para formar la bechamel, agregamos sal, pimienta negra y nuez moscada, todo al gusto de cada uno.
Cuando esté lista la salsa, añadimos las espinacas y mezclamos con una cuchara de madera. Removemos de nuevo para que se integren bien, y cocinamos durante unos minutos más.
Espinacas gratinadas
Una vez formada la crema de las espinacas con la bechamel, la pasamos a un recipiente apto para horno y añadimos el queso rallado por encima.
Luego, precalentamos el horno a 180º C durante 5 minutos, e introducimos la crema de espinacas en la parte de arriba con la función grill o gratinadora durante otros 5 minutos para que el queso se funda y adquiera un tono dorado y crujiente.
Retiramos del horno y servimos muy calentita en la mesa.
Estas espinacas gratinadas puedes acompañarlas con pan o con la proteína de tu preferencia. ¡Buen provecho!
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