Es un hecho. Llegó la privatización de gasolina en Venezuela, este 29 de mayo de 2020 en cadena nacional; el Presidente Nicolás Maduro anunció el nuevo precio del combustible en Venezuela.
Según analistas internacionales, Nicolás Maduro hizo dos cosas impensables para el país; una fue aumentar el costo del combustible y la otra, privatizar la industria petrolera; conociéndose que desde el año 1976, la industria petrolera venezolana es propiedad exclusiva del Estado.
El monopolio incluye el mercado interno de combustibles, el bajo precio de producción, la abundancia de reservas y el interés político valieron para que la gasolina se vendiera a precios insignificantes.
Esta realidad causó que en Venezuela fuese inconcebible incrementar el precio de la gasolina o, privatizar el negocio de su comercialización. Pero hoy la privatización de la gasolina en Venezuela llegó a nuestras puertas.
¿Y la lógica para cuándo?
Es increíble que un país donde yacen las mayores reservas petroleras del planeta, exista escasez de gasolina, o peor aun se importe combustible desde otra nación.
El país que se ha caracterizado por años, por tener la gasolina más barata del mundo, hoy en día, tendrá que pagarla a un precio mayor que otras naciones que ni siquiera producen petróleo.
Los politólogos recuerdan que en el mandato de Carlos Andrés Pérez se presentaron protestas por el aumento de la gasolina; hoy vemos un pueblo pacífico aún después del aumento masivo de precio por la privatización de la gasolina en Venezuela.
Hundimiento de la industria petrolera
El origen de todo esto, parte del grave declive de la industria petrolera. Durante el año 2002-2003, la empresa petrolera venezolana sufrió una fuerte reestructuración.
Durante el mes de diciembre de 2002, gran parte de los trabajadores de PDVSA obedecieron a un paro general empresarial indefinido; convocado por partidos de oposición, originando que la producción de crudo, así como las actividades de refinación y comercialización cayeran en más de 90%.
El mandatario del momento, Hugo Rafael Chávez Frías separó de sus cargos a miles de trabajadores de Petróleos de Venezuela.
Debido a esta medida el país se vio sumergido en un paro cívico nacional, y los despedidos superaron los 20.000 trabajadores.
Una vez finalizado el paro, PDVSA tardó aproximadamente año y medio en retomar condiciones de operación normales.
PDVSA fue politizada, y estos extrabajadores fueron suplantados por operadores políticos, y PDVSA se convirtió en la proveedora de fondos para la expansión política por el continente.
Hoy, la falta de operatividad de PDVSA, ha obligado a adquirir combustible en el mercado internacional. Los Costos que ha pagado por la compra de gasolina representan un golpe bajo en los balances de la petrolera.
Cabe destacar, que Venezuela ha estado importando gasolina con mayor frecuencia después del accidente ocurrido en la Refinería de Amuay en 2012.
Esta importación ha venido disminuyendo desde el febrero de 2019, luego de que el gobierno de Estados Unidos aplicará sanciones contra el gobierno de Venezuela.
¿Desde cuándo tenemos problemas de escasez de combustible?
Desde hace al menos seis años, Venezuela enfrenta un problema de escasez de gasolina cuya explicación puede resultar complicada; debido a que pese a contar con las mayores reservas de petróleo del planeta, sus ciudadanos deben hacer magia para conseguir combustible
Esta problemática llegó a su punto más alto en el 2020, debido a la disminución de la producción petrolera; y además por la falta de la capacidad refinadora de crudo.
Además a esto se le sumaron otros 2 factores importantes, la pandemia de SARS-CoV-2 y la negativa de los principales productores del mundo de vender gasolina a Petróleos de Venezuela (Pdvsa), debido a las sanciones impuestas por Estados Unidos.
En este contexto, diversos expertos aseguran que Nicolás Maduro intentará esquivar las sanciones; las cuales impiden tanto la exportación como la importación de petróleo y sus derivados; poniendo en manos privadas la adquisición, traslado, y distribución del combustible que se necesita en el país.
Una crisis progresiva en el 2020
Luego de que el presidente Nicolás Maduro anunciará la cuarentena Nacional, la escasez de gasolina se hizo mucho más evidente en Venezuela.
Se empezó a observar en las estaciones de servicios que desde tempranas horas de la mañana conductores hacían cola para surtir los tanques de sus vehículos; pero estos permanecían allí por largos días.
Debido a esta situación, el presidente a través de un comunicado dijo que pretendía importar la gasolina desde Irán; y además estudió a puerta cerrada la privatización de la compra, distribución, y venta de la gasolina en todo el país.
Una de las opciones que se maneja es conceder las estaciones de servicio, en calidad de comodato, a inversores privados.
Estos se encargarían directamente de obtener el combustible, ya que están libres de las sanciones de Estados Unidos.
La idea es vista con buenos ojos por los empresarios del sector. Actualmente, la Cámara Petrolera de Venezuela- Sugirió a través de un comunicado; la necesidad de autorizar a entes privados para importar combustible, por lo menos mientras dure la emergencia por el coronavirus.
Experto asegura que la importación no es la mejor opción.
Rafael Quiroz, experto petrolero y profesor universitario; piensa que esta medida serviría para disminuir la escasez de combustible que sufre el país, pero que tan solo sería una solución de carácter circunstancial.
Señala que de esta manera no se atacarían los factores que han llevado a Venezuela a depender de las importaciones para poder satisfacer el consumo interno.
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