El 30 de enero se celebra el Día Internacional del Croissant, una ocasión perfecta para deleitarse con este delicioso manjar de origen francés.
Su sabor, aroma y textura crujiente por fuera y suave por dentro, lo convierten en un panecillo irresistible tanto para el desayuno como para una merienda.
La idea de celebrar esta fecha es dar a conocer una pieza de bollería, que goza de mucha aceptación en el mundo debido a su rico sabor, además de que puede consumirse a cualquier hora del día con productos dulces como el chocolate o salados como los quesos y jamón.
Se dice que el croissant nació en Austria en el siglo XVII, con el nombre de kipferl. Sin embargo, fue en Francia, en el siglo XX, donde este panecillo adquirió su forma actual y se popularizó en todo el mundo.
¿Cómo preparar croissant en casa?
Si te animas a celebrar este día con una deliciosa experiencia culinaria, te compartimos una receta sencilla para preparar croissant caseros:
Ingredientes:
- 500 g de harina de trigo
- 250 g de mantequilla
- 250 ml de agua tibia
- 7 g de levadura fresca de panadería
- 10 g de sal
- 50 g de azúcar
Preparación:
Disolver la levadura en el agua tibia con una pizca de azúcar. Dejar reposar durante 10 minutos.
En un bol, mezclar la harina con la sal y el azúcar restante. Incorporar la mantequilla fría cortada en cubos y mezclar con las yemas de los dedos hasta obtener una textura similar a la arena gruesa.
Añadir la mezcla de levadura al bol y amasar hasta obtener una masa homogénea y elástica. Dejar reposar la masa en un bol cubierto con un paño húmedo durante 1 hora.
Estirar la masa con un rodillo sobre una superficie enharinada hasta obtener un rectángulo de 30×40 cm. Doblar la masa en tres partes como si fuera una carta y volver a estirar. Repetir este proceso 3 veces más.
Dejar reposar la masa en la nevera durante 30 minutos.
Estirar la masa nuevamente hasta obtener un rectángulo de 40×60 cm. Cortar triángulos de 10 cm de base.
Enrollar cada triángulo desde la base hacia la punta, doblando ligeramente las puntas hacia adentro para darle la forma característica del croissant.
Colocar los croissants en una bandeja para hornear forrada con papel vegetal y dejar reposar durante 30 minutos más.
Pintar los croissants con huevo batido y hornear en un horno precalentado a 180 °C durante 15-20 minutos, hasta que estén dorados.
¡Disfruta con lo que más te guste y celebra el Día Internacional del Croissant!
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