Ibrahim Boubacar Keïta, presidente de Mali, ofreció su renuncia el pasado martes por la noche, horas más tarde de ser aprehendido por militares rebeldes. En un anuncio por televisión, el ahora ex mandatario infirmó a su vez que disolvería su gobierno y el Parlamento.
Golpe de estado en Mali
“No quiero que se derrame sangre para mantenerme en el poder”, dijo.
“Querría en este momento preciso, al tiempo que agradezco al pueblo maliense su acompañamiento a lo largo de estos largos años y su caluroso afecto, anunciarles mi decisión de abandonar mis funciones, todas mis funciones a partir de este momento”, con “todas las consecuencias que se derivan: la disolución de la Asamblea Nacional y la del gobierno”, manifestó Keïta.
Sin embargo, el mandatario insinuó que su renuncia resultó forzada por los militares involucrados en el golpe: «¿Tengo acaso otra opción?», Preguntó luego de recordar que «ciertos elementos de las Fuerzas Armadas han concluido que esto debía terminar mediante su intervención”.
A la espera del nombramiento de un nuevo líder en Mali
Actualmente, los golpistas no han emitido ninguna declaración de intenciones ni comunicado alguno para explicar cuáles son sus objetivos. Tampoco han designado hasta el momento a un líder que asuma la jefatura del estado en este momento crítico, sin embargo, están esperando que lo hagan próximamente.
Asimismo, de acuerdo a un corresponsal de AFP, los militares rebeldes tras Golpe de estado en Mali tomaron el control del campamento y las calles adyacentes antes de viajar en convoy hacia el centro de la capital.
En Bamako resultaron aclamados por manifestantes reunidos para exigir la salida del jefe de Estado en los alrededores de la Plaza de la Independencia; epicentro de las protestas que afectaron a Mali hace varios meses, antes de dirigirse hacia la residencia del presidente Keita, según la fuente.
Antes del anuncio de la detención del presidente y su primer ministro; los países de África occidental, Francia y Estados Unidos habían expresado su preocupación y denunciado cualquier tentativa de derrocar al gobierno.
El secretario general de la ONU, Antonio Guterres, exigió el pasado martes la “liberación inmediata y sin condiciones” del mandatario de Malí.
La crisis en Mali se abordará también el miércoles en una reunión de emergencia a puerta cerrada del Consejo de Seguridad de la ONU, solicitada por Francia y Níger.
“El secretario general condena firmemente esas acciones y llama al restablecimiento inmediato del orden constitucional y del Estado de derecho en Malí”, manifestó el portavoz de Guterres por medio de un comunicado.
“La Unión Europea condena el intento de golpe de Estado en curso en Malí y rechaza un cambio inconstitucional”; informó por su parte el jefe diplomático de la UE Josep Borrell a través de un comunicado.
Fuente: Infobae
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