Una intensa tormenta de nieve, caracterizada por su rápido y severo impacto, se desplaza desde el Medio Oeste hacia el noreste de Estados Unidos, generando alertas sobre posibles apagones, vientos fuertes y condiciones peligrosas en las vías.
De acuerdo con CNN, la tormenta comenzó a afectar diversas áreas del Medio Oeste la mañana del miércoles, y se anticipa que sus efectos se intensifiquen en los días venideros.
El Centro de Predicciones Meteorológicas ha advertido que las ráfagas de nieve asociadas a esta tormenta podrían resultar en visibilidad nula en las carreteras, creando una situación extremadamente riesgosa para los conductores. Estas ráfagas, aunque breves, pueden transformar un trayecto que parece seguro en una trampa mortal en cuestión de minutos. Según CNN, «no hay ningún lugar seguro en una carretera durante una nevada», subrayó el centro.
Se han documentado incidentes en el pasado relacionados con tormentas similares. En 2022, una tormenta de nieve provocó un accidente masivo en Pensilvania, que involucró a 80 vehículos y resultó en la muerte de seis personas.
El miércoles por la tarde, las condiciones invernales se extenderán por los Grandes Lagos y partes del Medio Oeste, alcanzando el interior del noreste durante la noche.
El jueves, los efectos de la tormenta se sentirán con mayor intensidad en los Apalaches, la costa del Atlántico medio y Nueva Inglaterra, donde los vientos de hasta 80 km/h podrían ocasionar daños a la infraestructura y cortes de energía.
«Las zonas cercanas a la costa, incluidas ciudades como Nueva York y Filadelfia, podrían experimentar una mezcla de lluvia y copos de nieve, sin acumulaciones significativas».
Nueva tormenta de nieve
Una característica notable de esta tormenta de nieve es el fenómeno conocido como «nieve por efecto lago», que potencia las nevadas cuando el aire frío se desplaza sobre las aguas más cálidas de los Grandes Lagos.
Durante el reciente fin de semana festivo, esta situación ya provocó acumulaciones de hasta 152 centímetros en ciertas localidades. Para esta semana, se anticipa que se sumen entre 30 y 60 centímetros de nieve en las mismas áreas afectadas.
Nevadas más ligeras, que oscilarán entre 2 y 5 centímetros, impactarán las regiones de menor altitud en el noreste. No obstante, las zonas costeras, incluyendo ciudades como Nueva York y Filadelfia, podrían experimentar una combinación de lluvia y nieve, sin que se prevengan acumulaciones significativas.
Aunque no se anticipa que la nieve se acumule cerca de la carretera interestatal 95, las condiciones de humedad y frío podrían generar superficies resbaladizas, complicando el tránsito.
Las autoridades han exhortado a los ciudadanos de las áreas afectadas a evitar los viajes durante las ráfagas de nieve y a prepararse para posibles cortes de energía. Según CNN, los vientos podrían derribar árboles y dañar líneas eléctricas, especialmente en las zonas más vulnerables.
«En varias zonas ya se están desplegando equipos de emergencia y recursos para limpiar carreteras y asistir a posibles damnificados.»
El efecto de esta tormenta se prevé que sea más extenso que el de las tormentas anteriores, lo que ha motivado a las comunidades del noreste y el Medio Oeste a realizar diversos preparativos. En múltiples áreas, ya se están movilizando equipos de emergencia y recursos destinados a la limpieza de vías y a la asistencia de posibles afectados.
Con la llegada de la temporada invernal, los especialistas enfatizan la necesidad de adoptar medidas de precaución adicionales al volante y de mantenerse al tanto de las condiciones climáticas.
Con información: Globovision
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