Un estudio hecho por investigadores de la Universidad de Córdoba (UCO) y la Universidad de Salamanca estudió el comportamiento de los ciudadanos en la cuarentena; revelando que los desconfiados no cumplen las medidas ordenadas por la incertidumbre que dicho suceso acontece.
Desconfiados no cumplen las medidas de cuarentena
De acuerdo a lo que indicó la UCO en una nota, la pandemia de coronavirus está ocasionando un número significativo de estudios; no solo en el ámbito sanitario, sino también en el de la psicología.
Del mismo modo, la aparición de un nuevo coronavirus y su veloz brote a lo largo del mundo forzó a todos los países aplicar regulaciones para asegurar la cuarentena social colectiva, algo que no ha tenido precedentes a tan gran escala.
En los primeros días, el cumplimiento de estas normas resultó crucial para frenarlo sin embargo también se pudieron constatar comportamientos un tanto egoístas; que pudieron desencadenar en escasez de productos o inclusive en situaciones de miedo o alarma que pudieron ocasionar una crisis más elevada.
Sistema de valores
Un equipo de la Universidad de Córdoba y de la Universidad de Salamanca realizó un estudio acerca de las motivaciones que han conducido a la ciudadanía a seguir las recomendaciones asociadas al distanciamiento físico y, por otro lado, a realizar conductas egoístas; como la adquisición excesiva de productos alimentarios y de salud ante una percepción de escasez y una situación de mucha incertidumbre.
Para esta investigación se realizaron encuestas online a 1.324 personas con una media de 29 años procedentes de todo el territorio nacional. Se incluyeron variables de edad y sexo; así como datos relacionados con el número de personas con quien compartían vivienda y si conocían a personas que resultaron afectadas por el coronavirus.
«En una situación novedosa como el confinamiento con altos niveles de incertidumbre; es nuestro sistema de valores el que puede guiar nuestra conducta», han explicado las investigadoras del estudio; que han agregado que «los resultados han demostrado que aquellas personas que tienen altos valores universales y una preocupación mayor por los problemas sociales realizan menos comportamientos interesados o egoístas, como las compras innecesarias ante la amenaza de desabastecimiento».
Por el contrario, las personas con valores más conservadores relacionadas con la propia seguridad y la seguridad nacional tienden a seguir más los comportamientos decretados por el Gobierno relacionados con el distanciamiento físico.
Otra de las variables que han estudiado ha sido la búsqueda de información sobre el virus. En esta línea, se ha concluido que aquellas personas más informadas son las que tienen «una percepción más alta del riesgo y son las que más se adhieren a las normas de distanciamiento social y de higiene».
Los resultados han mostrado también que las personas tienen más confianza en sí mismas que en las demás a la hora de respetar las normas para frenar el virus. Asimismo, son las personas que menos confían en la sociedad a la hora de seguir estas normas las que menos cumplen las medidas.
Fuente: El Diario
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