SpaceX da inicio a un nuevo ciclo de exploración lunar, cuando dos módulos de aterrizaje robóticos y un pequeño explorador comenzaron su travesía hacia la Luna.
Un cohete de SpaceX despegó a la 1:11 am ET desde el Centro Espacial Kennedy de la NASA en Florida, llevando a cabo el lanzamiento de dos misiones no tripuladas hacia la superficie lunar.
Una de estas misiones, desarrollada por la empresa texana Firefly Aerospace, tiene como objetivo el aterrizaje de un módulo denominado Blue Ghost en una zona lunar conocida como Mare Crisium, una cuenca de 340 millas de ancho que se considera el lugar de impacto de un antiguo asteroide.
La otra misión, liderada por la compañía japonesa ispace, incluye un módulo de aterrizaje llamado Resilience y un «microrover» denominado Tenacious. Su destino de aterrizaje está previsto en una región conocida como Mare Frigoris, ubicada en el extremo norte de la Luna.
Este representa el segundo intento de ispace de aterrizar una nave espacial en la Luna. En 2023, su primer intento resultó en una decepción, ya que su módulo de aterrizaje Hakuto aceleró inesperadamente durante el descenso y colisionó con la superficie lunar.
Se anticipa que el módulo de aterrizaje y el explorador de ispace sigan un
SpaceX envió dos módulos
a trayectoria más prolongada y con menor consumo energético hacia la Luna, llegando después de cuatro o cinco meses, en comparación con el módulo de aterrizaje Blue Ghost de Firefly Aerospace, cuyo trayecto se estima en 45 días.
Blue Ghost transportará 10 instrumentos científicos de la NASA a la Luna y se prevé que pase aproximadamente dos semanas recopilando información sobre la superficie lunar.
Firefly Aerospace confirmó alrededor de las 2:25 am ET del miércoles que había recibido una señal del módulo de aterrizaje en órbita terrestre.
El administrador de la NASA, Bill Nelson, felicitó a Firefly Aerospace y SpaceX por el exitoso lanzamiento, afirmando en una publicación en X que esta expedición preparará a la agencia «para futuras misiones humanas a la superficie lunar».
La misión Blue Ghost forma parte de la iniciativa de Servicios de Carga Lunar Comercial de la NASA, mediante la cual la agencia ha adjudicado contratos a diversas empresas privadas para el envío de experimentos científicos, tecnología y otros tipos de carga a la superficie lunar.
Estos esfuerzos se enmarcan dentro del programa Artemisa de la NASA, cuyo propósito es facilitar el regreso de los seres humanos a la Luna en un futuro.
El módulo de aterrizaje Blue Ghost proporcionará datos valiosos para las próximas expediciones Artemis que contarán con la participación de astronautas, según lo indicado por Nicola Fox, administradora asociada de la Dirección de Misiones Científicas de la NASA.
Con información: Cactus 24
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